Muchos jóvenes sienten el llamado, pero no pueden formarse por falta de medios. México necesita nuevos pastores, y tú puedes ayudar a que uno de ellos diga “sí” con firmeza. Apadrina a un seminarista y haz que su camino hacia el sacerdocio no se detenga.
Cada vocación que se pierde es una luz que se apaga en la Iglesia.
Faltan sacerdotes. Muchos pueblos no tienen misa cada domingo. ¿Y si el próximo gran pastor de la Iglesia no puede seguir su camino por falta de apoyo?
Tu ayuda puede marcar la diferencia entre una vocación frustrada… o un nuevo sacerdote para México.
La misión es grande, los tiempos son urgentes, pero con tu apoyo, nada es imposible. Tu generosidad permite que continuemos haciendo posible:
Dirección espiritual
diaria
Vida comunitaria centrada en Cristo y María
Formación sólida en la doctrina católica
Preparación para una vida sacerdotal entregada y fiel
Con tu apadrinamiento, das un sacerdote a la iglesia.
Heraldos del evangelio – Mexico
No podemos quedarnos de brazos cruzados.
Hay jóvenes listos para entregarse a Dios, pero necesitan el respaldo de personas como tú.
No dejes que una vocación se apague por falta de recursos. Hoy puedes hacer la diferencia.
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